Endurance

No me vais a destruir. No, porque creo en ella, en mí y en mi trabajo. En que la reina de los cielos vela por mí. No vais a romper mi autoestima y mi mente con vuestro juego macabro, porque yo ya soy libre. Ya he salido, solo tenéis que dejarme marchar de verdad.

Yo esto lo peleo. Porque si por pendeja me caigo, por cabrona me levanto.

A day in the life

"Se me ha vuelto a caer el agua en el sofá... y pensaba que se me estaba durmiendo el culo, porque lo notaba frío."

Eres mi persona favorita del planeta. 

Post-feliz cumpleaños, por cierto... Héroe.

En el abismo

He vuelto a escuchar la banda sonora de Made in Abyss para ponerme, por fin, a preparar el material para el curso y estoy sintiendo. Simplemente, así. Estoy sintiendo, pero no sé qué es. Se parece a la ansiedad, pero no quema en el pecho. Más bien, siento los pulmones fríos. Frescos, no secos ni cortados por la helada. Estoy algo inquieta, aunque no tengo claro a qué se debe. Y no tengo ganas de buscarle una respuesta. 

Puede que esta música reviva recuerdos que tenía enterrados, momentos diferentes, momentos vividos. Tengo la necesidad imperiosa de ver el 1SE de 2020, de pronto quiero recordarlo todo con excesivo detalle. 

A veces tengo la sensación que vivir en nuestro pueblecito junto al mar ha anulado, de alguna manera, todo lo que he sido antes. Todo lo que he hecho, lo que he vivido, de pronto ya no es relevante. No es parte definitoria de mi vida, porque ahora me he transformado en alguien diferente. Y ese pensamiento me aterra, porque no quiero que eso sea así. Quiero que Escocia siga siendo parte de mí, quiero recordar el olor de mi oficina en lo alto de la facultad de forma vívida, quiero continuar siendo "la exótica" allá donde voy porque, pese a todo, me gusta serlo. 

Puede que sea por mi propia ansiedad, pero ahora que la cabeza está sanando, poco a poco, tengo que cogerme de la mano y organizarme para volver a ser "esa persona". Volver a Madrid me hace conectar con partes de mí misma que están echándose una siesta demasiado larga. Es momento de despertarlas con cariño, y ponerlas a trabajar. Porque quedan muchas cosas por hacer además de terapia. Porque tengo mucho que decir además de lo hasta el gorro que estoy de compañeros de trabajo o de deadlines imposibles. 

Y quiero dejar de tener miedo a las cosas a las que tengo miedo, porque planes a largo plazo siempre es bueno tener un par. 

Cosas que tienen que ver, no me gusta mi silla y me la voy a cambiar. 

EDIT: Acabo de ver el1SE de 2020 y me ha encantado. Me ha llenado de felicidad como no lo esperaba y me ha recordado las mil formas que tenía de hacer mi día bonito e interesante. Vamos a volver a eso, claro que sí. 

Gama de noche

Mañana voy a volver a pasar la noche en tu casa y me va a dar un ataque de las ganas que tengo de abrazarte otra vez. Te voy a apretar tan fuerte que te voy a hacer daño, me disculpo con antelación.

Quiero además proponer un brindis (con un estético matcha latte) por esos amigos que, con la tontería, veo cada vez que pongo el pie en Madrid. Estoy orgullosa de haber encontrado la cafetería y estoy orgullosa de la persona que eres, Yun. Así, porque sí. Venga, que no te queda nada y te unes al club de darle patadas a la academia. 

Qué estupendo este viaje, la verdad. Con todo, lo necesitaba. Y menos mal que tengo el cuerno de Gondor siempre colgando del cinto, y puedo hacerlo sonar cuando me haga falta. A ti te quiero más que a nadie. 

Flores de mayo, lluvias de no sé dónde

Estoy escribiendo esto con el portátil, prácticamente en el aire, mientras escucho el debate de posicionamiento de tropas de cierta cosa en la que estamos trabajando. Me lo dicen cuando empecé la tesis y me parto de risa, sinceramente.

He dejado de escribir historias cortas para el Temerario porque, de pronto, perdí el hilo y ya no lo recuperé. O quizá es que nunca me puse a buscarlo, que también es posible. Pero como él es lo más bonito del mundo, me dijo que no pasaba nada y que esto debía ser más un asunto de voluntad y de querencia. Teniendo en cuenta que el mes de mayo es una bendita locura, que yo no sé cómo lo he hecho, recuperaremos en junio la mandanga. 

Lo bonito es que volveré a dar clases, y estoy muy emocionada. Los Aqueménidas siempre son mi go-to, por alguna razón, en lugar de irme a manuscritos y dragones. Ya el año que viene, o dentro de seis meses. Seguro. Total, siendo cursos gratis, que me quiten lo bailao. 

Hoy me he despertado echando de menos a Martita. Pero mucho, mucho.

Bueno, y a Sombra, pero qué día no me pasa eso. 

Tengo un misterioso pinchazo en el abdomen y el hombro izquierdo hecho mistos.

Lo dejo aquí anotado, por si acaso.