21 de diciembre de 2019

Despedida I

Ahora tengo un certificado de idiomas que empieza diciendo "en el nombre de Dios". A mí, sinceramente, no me puede parecer más divertido. 



La despedida de Tehran fue bastante más dura de lo que yo me imaginaba. Y eso que, durante las tres últimas semanas de estar en Irán, empecé a ser consciente de la verdadera importancia que tenía el haber estado allí. Por todo lo que he vivido, y por las personas que he conocido. Creo que lo he mencionado en más de una ocasión, pero nunca imaginé llegar a querer tanto a gente con la que iba a pasar, en comparación fría y calculadora, tan poco tiempo. Pensaba que solo serían amigos en el naufragio, gente circunstancial con la que pasarlo bien y después, quizá, intercambiar algún que otro mensaje a lo largo de los años con conversaciones un 85% basadas en recordar cosas que hicimos juntos y otro 15% en preguntar qué tal estás, cómo te ha ido, qué has estado haciendo, me alegro, cuídate. 
Pero las personas no son números. No estas personas. 

Despedirme de Tehran fue despedirme de un hermano que me encontré por el camino. Y estuve profundamente triste, y lloré lagrimones que me arañaron por dentro como clavos. Darme cuenta de que aquella porción de vida se acababa para siempre, que no habría forma de revivir la que habíamos convertido en nuestra rutina, me mató un poquito por dentro. Pero también me hizo sentir querida y valorada, porque con solo unas semanas compartiendo comidas, té (mucho té), deberes, locuras y estupideces, alguien podía llegar a quererme tanto y de forma tan incondicional. Sin importar qué hubiese sido yo antes o la cantidad tan grande de imbecilidades que hubiese hecho. 
Otra persona, vittuza mía, me dijo que yo era una inspiración para ella y un modelo a seguir. Le dije que se replantease sus elecciones personales, pero me sentí tremendamente halagada. De qué voy a ser ejemplo yo; invito a cualquier a pasar 12 horas dentro de mi cabeza para concluir que soy muchas cosas, menos un ejemplo. Y, sin embargo, ella de verdad lo creía. 
Otra persona me dice casi a diario que me echa de menos. A otro lo terminé de descubrir en las dos últimas semanas. A otra nunca llegué a comprenderla. Con otro me casaría de verdad. Y así podemos contar tantas, que es sorprendente. El hecho de tener tantas personas bellas que contar y recordar. 

Madre mía, que triste me puse. Qué tristes nos pusimos. Cuando eché un sprint para abrazarte de nuevo y te encontré llorando detrás de una columna, pensaba que me moría. Porque con que uno de nosotros estuviera triste, pensaba que era bastante. Pero ay, la tristeza y el llanto. Probablemente el padre de Fede me quiera matar por tardar tanto, pero le van a dar por saco. Yo tenía que dejarte bien estrujado hasta la próxima vez que, espero, nos volvamos a ver. 
Todo apunta que no pasarán más de seis meses, pero por si acaso. El poder hablar contigo a diario es algo que me gusta y me llena a partes iguales. Es la manera de saber que siempre estarás conmigo, no importa la mamarrachada que haga, hagas, hagamos. 
Que te quiero mucho, coño. 

Y quería escribir algo más largo, pero ha llegado el Flaco para que nos tomemos un FlaTime y evidentemente, no le voy a hacer esperar. 





Cosas que tienen que ver, ayer vimos Cerberus y madre del verbo, la risa. La risa. 

17 de diciembre de 2019

¿Sus quedáis, princesa?

Prometo que mañana me despido de mi estancia en Tehrán como corresponde (y con los lagrimones que sé que voy a echar). 

Pero hoy tengo que contar la aventura de búsqueda del tesoro de la que me ha hecho partícipe Bob, cuyo regalo venía con un mapa y un aviso de que, en caso de no probar mi valía encontrando lo que fuese que tenía que encontrar, "una antigua maldición caería sobre mí". Pero que me ha hecho cavar el tío, y todo. Cavar y hacerle un destrozo al jardín de su madre, que el babuchazo que me va a soltar Carmen cuando se entere, va a venir con toda la justificación del mundo. 
Resultó que el cofre sí existía, y que estaba lleno de fresitas, y que al final he sido digna de abrir mi regalo, que era una camiseta de Hollow Knight pero pirata. Magnífica, por cierto. 



Te quiero, Bob. Te quiero muchísimo. 
Gracias por seguir haciendo de mis cumpleaños algo tan maravilloso, divertido y bonito. 





"¡Tanto Black Sails y no se quiere llevar el mapa! ¡Vaya una birria de pirata!"

8 de diciembre de 2019

بهتر بودم

Hoy he tenido mi primera conversación casi por completo en persa, casi, durante dos horas. Y ha sido fantástico. No me he dado cuenta de que no he parado de hablar hasta que me sentado en el taxi para ir a casa de Rend (con la cabeza como un bombo rociero, por cierto), y la verdad es que estoy muy contenta y orgullosa de mí misma. 
Luego mi romanticismo incurable me ha hecho darme cuenta de que estoy hablando como más o menos lo hubiera hecho Avani en su momento, y me he emocionado bastante. 



Cosas que tienen que ver, que nos pille confesados, que mañana tenemos examen. 

توت فرنگی نشو!

Es que siempre nos tiene que pasar alguna, y siempre tiene que ser a nosotros. 



Bueno, pues ya lo he hecho. Ya he visitado Esfahán, como casi un 87% de las personas que he conocido en Irán me recomendó que hiciera. Y me ha gustado, no lo voy a negar, pero... en un mundo en el que Yazd, Persépolis y Naqsh-e Rustam existen, ¿cómo va a ser la capital del mundo Safaví mi ciudad favorita? Imagino que, quitada la presión que a mí misma me había puesto, ya puedo decirle a quien se me cruce por medio que Esfahán me dejó maravillada, y por dentro seguir pensando lo que me dé la gana. 
Aunque ahora, es cierto que la pequeña madrasa (que ni siquiera sé si es auténtica o no) donde se supone que Ibn Sina enseñó me robó el corazón. Y escuchar música junto a Si-o Se Pol y el Puente de Guillermo del Toro también es algo que espero recordar por siempre. Porque, de verdad, que Esfahán me ha gustado. Más que probablemente por la absurda y excelente compañía que he tenido en estos días, en estas semanas, en estos meses. 



Cuando he llegado a mi habitación de la residencia, me han caído encima los cinco días que me quedan para marcharme como cinco losas de granito. Ha sido como si verdaderamente me pesaran los hombros, la espalda y el estómago. Y es que me he descubierto triste, tremendamente triste, y de pie en medio de una terriblemente aprovechada habitación que pronto dejará de ser "mía". 
Me he puesto más triste de lo que me imaginaba. 
Me he puesto a pensar cómo esta rutina construida a base de ir a la escuela, salir, comer y hacer deberes en el Ketab Café no ha sido más que un corto periodo de tiempo, más corto, mucho más corto de lo que esperaba sentir cuando me bajé del avión, un 11 de septiembre, con más miedo que otra cosa. Ahora me marcho de Teherán sabiendo que una parte de mí se va a quedar aquí por siempre, y mira que me da asco esta ciudad. Pero un pedazo de espíritu se va a quedar en la calle Valiars, en el Ayandeh, en el Viuna con sus gatos, en el metro y el BRT, en las tiendas, incluso en el humo de los coches, en cada Praide Sefid que aparezca en la pantalla de un teléfono móvil. 
Y, especialmente, parte de mi espíritu se va a quedar contigo. 

Creo que en algún momento de estos meses lo he dicho, pero yo no esperaba encontrarme un hermano aquí en Irán. No esperaba conocer a alguien con quien conectase a niveles tan profundos en tan poco tiempo, con quien me riese tanto, con quien compartiese aventuras, momentos serios y muchísimo té. No me he dado cuenta hasta hace poco de lo mucho que he llegado a quererte y de lo tantísimo que te voy a echar de menos. Y quizá por eso me he puesto más triste de lo normal, porque aquí en Irán te dejo. Pero a partir de este momento, te llevo conmigo. No me hacen falta pulseras o recuerdos, cartas ni regalos, ninguna nota escrita en un papel de escuela. Lo que me llevo puesto son todas las horas, todos los abrazos, las inacabables risas y esas cosas tan bonitas que nos hemos dicho. Y solo nos conocemos de hace tres meses. 
Qué bonito pensar que era algo parecido al destino. Tú tienes más miedo que yo de que no volvamos a vernos, de que las siete horas de diferencia maten lo que ahora tenemos, y yo tengo extremadamente claro que eso no va a pasar. Esta amistad es demasiado genial como para dejarla morir en algún callejón asqueroso de Teherán. 

Te conozco de siempre y llegaste hace un rato. 



De verdad, gracias. Y no sé si alguna vez llegues a leer esto, pero gracias por aparecer en mi vida y hacerla tan bonita estos tres meses que hemos compartido en Irán. Gracias, Raúl. 





Cosas que tienen que ver, evidentemente nuestras palabras del juego de hoy tenían que ser khormalu, praide sefid, trout y shotor. Es que de verdad somos idiotas. 

30 de noviembre de 2019

تیرانداز

My grandfather told me once a Warrior is that who is able to overcome their greatest fears. That who dares to explore what still remains unknown. That who embraces humbly how much knowledge is yet to be discovered and pursues more, always more.
A Warrior is that who is not held back by uncertainty.


I had the opportunity to pick up a bow and shoot. Sometimes I even got the actual target. But the true prize has been being surrounded by so many Warriors from whom I've learned and earned an indescribable amount of life.
Thank you for accepting such a beginner as me in your circles and for taking the time and patience to teach me. Who knows where I would go with my bow and my lonely arrow now.


For me, what truly matters is that I was able to live something this fantastic and peculiar.


See you next time, shoyad.

28 de noviembre de 2019

همه چیز خوب است

Este es básicamente un post de apreciación a Favaro Leone, sin duda el mejor personaje que ha dado la serie Shingeki no Bahamut, que yo espero que continúen pero, si no lo hacen, tampoco pasa nada. Genesis y Virgin Soul son lo suficientemente buenas como para que se queden como están. Pero, en serio, qué gran personaje es Favaro. Enorme, grandísimo. Y eso que mi favorito siempre va a ser el desgraciado de Azazel, pero Favaro es que es Favaro. Él y su guitarra española como tema principal. 
Qué maravilla de serie, por la Virgen en Bicicleta. 



Ayer tuvimos una sesión italiana (como si mi estancia aquí no tuviera bastante de italiana ya), bebimos Martini y comimos pasta porque, pues somos básicos. Echo de menos a las ragazze, especialmente a Chiara. Y ayer, creo que o yendo o viniendo en el taxi, o quizá fue en otro trayecto en Snapp, la verdad es que no me acuerdo, caí en la cuenta de lo privilegiado de estar compartiendo un pedazo de nuestras vidas en unas circunstancias tan anómalas como las nuestras. 
Lo bonito que es para la historia de nuestra vida el habernos cruzado aquí, en el culo del mundo persa conocido, en una escuela de idiomas que nos enseña de todo, menos cómo cojones se pide la cuenta en un restaurante. 
Pensé en cada uno de nosotros y en nuestras circunstancias, y al recibir un mensaje del "mundo exterior" que me hablaba de asuntos académicos, me percaté de que parece que todo se haya detenido para nosotros en este instante. En este momento que decidimos vivir en Irán. Pensé en mis compañeros que son mitad iraníes y que hablan perfectamente, pero que no saben leer ni escribir. Pensé en los que estamos aquí por motivos profesionales o académicos. Pensé en los que están aquí simplemente porque les apetece. Y después de pensar, también, en la fantástica selección de gilipollas que me podía haber tocado, descubrí que lo que tenía no podía ser más distinto. 
En la selección de personas maravillosas con las que he podido encontrarme. En esos amigos que ya sabemos que van a ser para toda la vida. 
No voy a extrañar vivir aquí, estrictamente hablando, pero Satanás viviente que los voy a extrañar a ellos mucho, muchísimo, cada día. No sé qué serán mis días ahora que he conocido esta rutina, una rutina tan poco común, pero tan mía, al fin y al cabo. Pues no sé qué voy a hacer sin tenerla. Imagino que me acostumbraré, pero prometo pensarles cada mañana, cuando me despierte y no tenga que salir a esperar el autobús, ni el timbre estropeado, ni bajar al sótano para tomarnos un té. 
Me estoy poniendo sentimental. Pero es que de verdad les quiero. 



Soy una persona tan privilegiada que he tenido dos celebraciones de cumpleaños. En la segunda, Anahita me compró una flor que se abría al encenderla, y daba vueltas (o eso se suponía), y cantaba el Cumpleaños Feliz de forma poco tranquilizadora. El susto que me llevé al apretar el botón del centro está grabado. Y el "coño" que me salió del alma, también. 
Rend me trajo una cesta con flores, Clement, Giaco y Jacques cocinaron, Raúl y Fede se pelearon por pagar la Coca Cola, Elisa me regaló un CD, y en general vino mucha gente estupenda a comer con nosotros. Y bailamos, y cantamos Ricchi E Poveri, y la Macarena. Y fue una noche magnífica, con gente todavía más magnífica. 
Estaba pensando si escribirlo o no, pero esto limpia con creces los restos de basura que había dejado mi cumpleaños del año anterior. Esto era exactamente lo que necesitaba para dejarlo ir. Ahora tengo el pecho limpio y la barriga llena, porque madre mía, sabe el Demonio que no he hecho otra cosa que comer en las últimas dos semanas. 



Ah, y ya hemos visto Nosotros los Nobles
Y Barbi... no mames. 





Cosas que tienen que ver, no puedo enfatizar lo suficiente el personajazo que es Favaro Leone, de Shingeki no Bahamut. Hale, ya lo he dicho. Me voy a ver qué se cuentan Simurgh y el Dragón, a ver si dejan de pelearse los cabrones.

24 de noviembre de 2019

تولدت مبارک!

Hoy he tenido uno de los cumpleaños más divertidos de mi vida. 

Para empezar, la experiencia de cumplir 29 en Irán, especialmente después de la semana de locos que hemos tenido, ya ha sido algo para apuntar. 
Después de clase nos hemos ido a comer a Dejà Vu, y he comprado unas tartas de Lavender con unas velas (exageradamente doradas) para soplarlas, porque me hace mucha ilusión soplar velas, la verdad. Cuando ha llegado el momento de la tarta en el restaurante, además de que me han puesto una versión extremadamente funky de Tavalode Mubarak, seis aghas con delantal del restaurante han venido a cantarme dando palmas. Tengo como tres vídeos de eso, y el segundo del día ha salido simplemente magnífico. Yo me he muerto de la risa, la vergüenza y la emoción. 

El día ha continuado con una fallida visita al bazar para buscar los pendientes de Alessandra, pero no ha habido manera. Lo que sí hemos visto ha sido una ristra inacabable de joyería hortera y de mal gusto. Y nos hemos reído tanto. 

Por supuesto, teníamos que acabar en Lamiz con un chocolate caliente amargo, pues porque nos queremos mucho y era mi cumpleaños.

Al volver a casa he tenido mensajes, llamadas, vídeos de perros y mucha, mucha gente que me quiere y que siempre se acuerda de mi cumpleaños. Incluso tan lejos, aquí en el culo del mundo persa conocido. La verdad es que tengo una suerte que no me la creo. 
Qué ricas las tartas de Lavender. 
Y qué maravillosa mi gente de Irán. 

Preveo grandes cosas para este año que acabo de estrenar. 



تولد، تولد
!تولدت مبارک
مبارک مبارک
!تولدت مبارک
!لبت شاد و دلت خوش چو گل پرخنده باشی
!بیا شمعا رو فوت کن که صد سال زنده باشی

22 de noviembre de 2019

امن

Ahora está todo tranquilo y ha vuelto internet (al menos en el ordenador), así que podemos comunicarnos y soltar algo del aire que hemos estado reteniendo los últimos siete días. 



La semana ha sido... complicada. No estoy muy segura de lo que puedo contar o no. Pero básicamente, hace una semana el gobierno cortó toda conexión a internet dentro del país. A mí me pilló en Kordan y, como estaba perfectamente bien, no le di demasiada importancia hasta que al tercer día me preocupé por hacer malabares y llamar a mi casa. Cosa que no fue sencilla, ni conseguir llamar ni después hablar con todo el mundo para decirles que, fundamentalmente, estaba viva y segura. 
Otras personas no han tenido la misma suerte que yo, y el número de muertos ha subido a las tres cifras. Aunque la peor parte se la llevan los iraníes, como siempre, nosotros tampoco lo hemos pasado bien. Estar casi completamente aislados, y sin saber qué era exactamente lo que estaba ocurriendo ni cuándo iba a terminar, si quiera si íbamos a poder quedarnos o tendríamos que salir corriendo hacia el aeropuerto y huir, eso es algo que no le deseo a nadie. 
Las recomendaciones de las embajadas, que no han podido portarse mejor, ayudaban pero no tranquilizaban. Hemos caminado con miedo. Hemos ido a clase y hemos vuelto todos juntos, como en una manada de presas que intentan mantener el buen humor pero que saben que, en algún momento, alguien puede volverse loco y hacernos daño. 

Afortunadamente para nosotros, nuestros barrios han sido seguros, creemos, desde el principio. No sé, ha sido una sensación muy rara. De aguantarse la tensión, de reprimir las ganas de decirle a la gente que estás preocupada, que a veces te asustabas y te desesperabas, de buscar respuestas en todo el mundo y, al obtenerlas, darte cuenta de que estabas mejor sin ellas y de que no las querías oír. 
Ha sido una locura, desde luego. 

Pero si me tengo que quedar con algo, a pesar de todo el miedo, de la incertidumbre, de la violencia y del salvajismo criminal... si me tengo que quedar con algo, es con la ternura. Esa ternura que nos ha mantenido unidos, inconscientemente protegiéndonos los unos a los otros de una realidad que no acompañaba para nada. He visto cariño y ternura en los ojos de la gente que tengo a mi alrededor. He visto mil formas diferentes de intentar lidiar con el problema, desde la risa hasta la charla seria, los chistes, la comida, los abrazos, ese casi constante "vamos a estar bien". 
Quiero agradecer a esa gente que se haya quedado conmigo durante este alocado temporal de semana. 

Y, por encima de todo, le quiero dar las gracias a Raúl, a mi primo-esposo, por ponerse en contacto con mi familia cuando yo no podía. Por estar siempre, siempre a mi lado. Por ser la persona en la que más puedo confiar, aquella que me ha dado la fuerza y la risa para seguir adelante. No sé qué haré cuando me vaya y no le vea todos los días. No habrá momento en que no le extrañe. 
Porque yo a Tehran vine con muchas dudas, pero la certeza que tengo ahora mismo es que yo de aquí me marcho con un hermano. 



Ya estamos bien. Ahora, por fin, ya estamos bien. 

14 de noviembre de 2019

باشه!

Tengo mucho que contar, y me sorprende haber hecho todas las cosas de mi To Do List para hoy en algo menos de una hora. Si es que, cuando algo me interesa...


A mi vida ha llegado una chica con la mejor combinación personal posible: es guatemalteca, su padre es iraní (o sea, que su persa es perfecto), y además, se llama Anahita. Y no es una broma. ¿Se parece a la Anahita de mi mente y de Yazata? Pues tiene algunas cosas similares. Pero lo que sí tiene, seguro, es una gran capacidad para hacernos reír y sentir bien. La verdad es que, como le comentaba ayer a Bob, estoy muy bien en Tehran, y nunca me imaginé que pudiese ser así. 

Raúl sigue siendo mi primo y el único chino de su natal Valencia, y la verdad es que voy a echarlo terriblemente de menos cuando me marche. Sé que encontraremos la manera de vernos de nuevo, yo estoy seguro. La familia siempre unida, en forma de trucha. 

Después de darle vueltas y de superar el pozo negro que parecía insalvable ante mis ojos, hoy me marcho a Kordan para pasar los cuatro próximos días entre caballos, arcos, flechas y profesionales de la materia. ¿Voy a ser la que menos sepa del campamento? Sí. ¿Voy a aprovecharlo al máximo y a disfrutar como creo que debo y merezco? Quoting Alastor... maybe! Pero en serio, haré el mayor esfuerzo por no dejar que mis miedos vengan a morderme los tobillos. 



So, I feel that is pretty much it. I thought it was more!

Ah, sí. Ayer empezamos a ver His Dark Materials todos juntos, en armonía y familia, y concluimos que tener un daemon jirafa sería terriblemente impráctico, pero de alguna manera, lo más guay del universo. 

8 de noviembre de 2019

عروسی شاهدخت

Ayer fui consciente de mi progreso en persa y la historia me parece tan bonita que la quiero contar.


Resulta que khanume Gabriela, aqha-ye Raúl y yo andábamos ayer de librería en librería buscando un manual de expresiones en persa que Gabriela quería comprar. Mientras ella le preguntaba a los libreros, yo me dediqué a pasearme con Raúl en busca de títulos que leer de aquella manera, pues porque Elementary 2 y Elementary 3.

El caso es que di con una novela a cuyo título no presté la más mínima atención. Solo vi el dibujo de la portada, donde salía una muchacha con su pelo al viento y un muchacho enmascarado con un florete detrás de ella. Y yo, en mi plena estupidez, le señalé el libro a Raúl y dije: "¡Mira, qué monos! ¡Son Westley y Buttercup, de La Princesa Prometida!", y luego me eché a reír porque a veces me entretengo con mi propia absurdez. 

Pero el caso es que estuve leyendo las letras...
Y vi عروسی, que significa "novia"...
Y vi شاهدخت, que significa "princesa"...

Y me di cuenta de que, efectivamente, era The Princess Bride, La Princesa Prometida
No puedo describir exactamente la ilusión que me hizo ser capaz de leerlo y entenderlo. Abrí una página y, aunque con dificultades (pues porque Elementary 3), pude entender el significado de varias frases. Supongo que el hecho de saberme la película de memoria ayuda, claro. Pero aún así, fue la materialización del progreso que está ahí, aunque me machaque a mí misma porque no puedo leer manuscritos del siglo XII sin ayuda todavía, aunque me pase la semana pensando que debería estudiar más. 

Ese libro está ahora mismo en mi mesa, con un post-it marcando la página en la que Íñigo dice su famosa frase, que ayer también pude leer. 

La felicidad, en realidad, son estos pequeños detalles. Lo digo poco, pero estoy muy, muy orgullosa de mis progresos. 

...سلام... اسم من اینیگـو مونتویاست. تو پدرم را کشتی... برای مرگ آماده باش



Cosas que tienen que ver, y otras leyendas iraníes urbanas. 

3 de noviembre de 2019

معلوم است که من یک پرنده هستم

According to a funky internet test consisting of discovering which Guatemalan legendary creature you are, I found out I am the Siguamonta.

I don't think Guatemalan horror stories are that well known, so let me take this opportunity to tell you about it.
Of course, it is a bird. I did not cheat on the test, it came out like that.

The Siguamonta is the result of the mixture of other legends, but basically, it is a bird that hides in the night and attracts children with its distinctive song. Then, it either leads them to their own death or itself brutally murders them.
Its tale was used to prevent children from running away or wandering the surrounding forests during the night.

A Geococcyx velox or Lesser Roadrunner is the most agreed shape the Siguamonta has. At least, it is the bird that everyone uses when speaking about the Siguamonta.

Cheers to Guate, one of my favourite countries in the world.



These are the things I occupy myself with instead of working on my thesis.



Cosas que tienen que ver, verás mañana la que vamos a liar en la fiesta de Día de Muertos de la embajada de México entre Gabriela buscando el tequila hasta en las macetas, Mauricio intentando reconquistar a la khanuma que le hace ta'rof, Lau robando cada calaco que se encuentre y Raúl con cara de circunstancias e intentando aceptar que sus amigos son, in fact, unos impresentables. 

2 de noviembre de 2019

شما دارچین می نویسید

Creo que lo escribo poco, pero me gusta trabajar en mi tesis. Quisiera tener mejor nivel de conocimiento y de inglés para que mis ideas pasaran de la cabeza a la pantalla con algo más de fluidez, pero algo me dice que incluso siendo yo bilingüe o escribiendo mi tesis en español, tampoco estaría exenta de mil correcciones. 
De verdad, me gusta. Por algo la escogí. 



Cosas que tienen que ver, hoy me he enterado de que "canela" se escribe دارچین y no درچین. He vivido engañada. Menos mal que هل he sabido escribirlo perfectamente. A ver si tengo suerte y el pedorro del francés se va. A otra clase o a la mierda, pero que se vaya.

31 de octubre de 2019

می خواهم بگویم

La ilusión que me hace escribir estos títulos, pero escribirlos de verdad, sin usar el traductor ni mierdas, no la sabe nadie. Nadie. Solo la sandía de la fuente, o el filete cortado en forma de trucha. 


Hoy era el último día de Cami en Tehran y me he enterado a la hora de comer. Se me ha quedado la cara un poco torcida, porque pensaba que le quedaban al menos otros dos días aquí, pero ha tenido que marcharse por problemas que no podemos comentar, de los que no podemos hablar, porque entonces nos meteríamos nosotras en algún apuro más grande. Qué terrible es el miedo, y qué triste es ver cómo pagan sus deudas aquellos que menos lo merecen. 


El caso es que, viniendo en el Snapp, se me había ocurrido escribir algo más hoy porque me he acordado de algo, de algo que no conté ayer y que ahora mismo no soy capaz de recordar. Yadam raft
Y el caso es que he abierto YouTube y he visto que hace tres días salió el piloto de Hazbin Hotel y yo aquí, con estos pelos. Quiero ser Alastor, me lo pido para siempre, por favor, por el poder de la Virgen en Docharkhe. 



En serio, cagontó, ¿qué era lo que yo quería contar?



Da igual, porque Hollywood Undead ha sacado una canción nueva y, gracias a Satanás en su trono infernal, vuelve a sonar como aquello que yo tanto echaba de menos.

30 de octubre de 2019

دوست دارم زندگی رو

No me puedo creer que desde el final de agosto no me haya sentado a escribir, y que lo último que aparezca cuando entro sea que estaba peleándome con el ordenador para abrir Timruk, que resultó ser una mierda. Pero, en realidad, tampoco me sorprende. Los diez primeros días de septiembre fueron una absoluta y bonita locura (y tengo mi segundo diario para recordarme lo bien que los viví), aunque tenía mucho miedo, muchas inseguridades, muchas preguntas. 
No es que ahora no las tenga, pero afortunadamente varias de ellas se han despejado. Venegas no me va a escribir el prólogo, el libro no está acabado (but soon, be Khoda, soon), llevo cincuenta y dos días en Irán y he acabado el primer term de mi escuela. Que he aprobado con flying colours, y estoy muy orgullosa de mí misma y de lo que he trabajado. 

Y ahora tengo a Rumbo, Escota y Eco, a Iegor y a Nur, cosa que me hace muy feliz porque, no importa dónde llegue, pero me hace feliz. Y he descubierto SIX, y gracias señor Doctor. 



Llevo cincuenta y dos días en Irán, y he cumplido varios de mis sueños. He estado en Persépolis, en Naqsh-e Rustam y en Pasargada. He subido a las Torres del Silencio de Yazd y he visto con mis propios ojos uno de los Fuegos Eternos. Lloré cuando estuve delante, lloré de emoción cuando lo vi, porque fue la confirmación (si es que necesitaba alguna), de que realmente estaba allí. Casi lloro cuando vi la que pensamos que es la tumba de Ciro II, casi lloro delante de la Puerta de las Naciones y cuando encontré al pájaro Huma. 
Estaba empezando a sentirme un poco triste porque, para qué esconderlo, Tehran no me gusta nada y no había tenido más que la oportunidad de ir a Kashan (y aquello salió como salió). Sentía cierta presión de tener que visitar y explorar un país al que no he venido de vacaciones, y me daba pena no haber ido "todavía" a los sitios más icónicos. Pero, por fin, lo conseguí. Y ha sido un antes y un después en mi vida. En Facebook escribí que había sido uno de los días más importantes de mi vida, y no mentía. He visto esos sitios en millones de fotos, no me he cansado de hablar de ellos en las Plumas... pero ahora los he caminado, los he vivido, con su sol abrasador y sus nubes perdonadoras. Y, además, pudiendo comunicarme. Mi persa no es excelente, pero la mejor ha sido tal que ya estoy contenta, a mitad del camino, de todo lo que he vivido. 
Quiero pensar que me merecía esto. Que visitar estos sitios ha sido una recompensa por la que he trabajado. Así que gracias, abuelo. Porque estabas conmigo a cada paso. Cómo me hubiera encantado que explorásemos estos lugares sagrados juntos. Cómo quisiera que estuvieras aquí, esperando a que volviese a España, para poder contarte todo lo que he vivido en este país de locos. Pero tengo que acostumbrarme a estar bedoone to


Esta última semana ha sido el viaje que quería, el que siempre había soñado. Y he contado con la mejor compañía, la del señor Raúl Doctor, experto en filetes cortados en forma de trucha y en perros que se hacen toro. Lo hemos pasado increíblemente bien, nos hemos reído, nos hemos cagado en la puta, nos hemos vuelto a reír. Pero no me regañes

Este último mes y medio ha estado lleno de muchas cosas, de ragazzas italianas que ahora dicen que yo también me he italianizado porque non ho capito un cazzo. Las voy a echar mucho de menos, la verdad. Pero nos veremos en Roma, ya estamos planeando el encuentro persiano. Yo de aquí me marcho sabiendo persa, francés e italiano, porque total, ya a qué vinimos. A poner sandías dentro de las fuentes para que Papalote se ría de mí. 
No me gusta Tehran, pero me gustó que Yasmin estuviese conmigo para descubrirme algunas de sus caras más bonitas. Y me gusta despertarme y ver la punta del Alam Kuh, la cima de Tochal, delante de mi ventana. Y aunque no pude evitar llorar por la presión, me han gustado las ocasiones que he podido compartir con Ali Ghoorchian y su entrenamiento para convertirme en algo que remotamente se parezca al horseback archer



Quería escribir en este No'j que he pisado Persépolis, Pasargada, Naqsh-e Rustam y Yazd. Quería recordarlo por siempre, por escrito, de corazón, de pensamiento. Quería, quiero, revivir esta experiencia cada vez que cierre los ojos. 
Gracias, vida, porque puedes ser maravillosa. 
Dust daram zendegui ro.



خورشید و نورو ابرای دورو
هر چی که رو زمین و آسمونه
بهم انگیزه میده
رها کن دیروزو زندگی کن امروزو
هر روز یه زندگیِ دوباره ست یه شروعِ جدیده

دوست دارم زندگی رو، دوست دارم زندگی رو
خوب یا بد ، اگه آسون یا سخت، نا امید نمیشم
چون دوس دارم زندگی رو، دوس دارم زندگی رو




Cosas que tienen que ver, voy por la mitad de Escuadrón, tengo la mesa llena de regalos y ya no sé cuántas anar he comprado. Hoy vamos a comer en Hestooran y ya me está dando hambre.
Cosas que tienen que ver, a ver si ahora que ya he hecho trampa para meterme en el No'j escribo más seguido. ¿Mes y medio de ausencia? ¡No puede ser! ¡Que saquen la sandía de la fuente! 

30 de agosto de 2019

The Draft

Le acabo de mandar el primer borrador al señor Venegas y se me va a salir el corazón entre las costillas. Madre mía, el ataquito. Menos mal que esta noche voy a comer como una cerda y que esta tarde Bob y yo vamos a diseñar zombies, porque, si no, me quedo en la silla. 



Voy a echarle un vistazo a Timruk, que tiene buena pinta. Si consigo abrirlo, claro. 

28 de agosto de 2019

Persas & Sexo

Resulta que, por las normas de internet, ahora soy influencer porque me invitan a los sitios y me regalan cosas sin que yo las pida. Todavía estoy asimilando lo bien que se ha portado esta gente conmigo. Gracias, una vez más. Espero que esto sea el comienzo de una amistad estrecha. 


Me ha encantado pasar este improvisado "fin de semana" contigo. Solemos pasarlo bien, pero últimamente lo paso mejor. Quizá porque estoy más segura de mí misma (igual es la edad) o porque me preocupo menos de lo que normalmente me preocupo. Que ya me he decidido a disfrutar del tiempo contigo, ya sea cantando, riéndonos porque no me dejas morderte la oreja o comiéndonos a besos. Te quiero mucho, niñe guape. Pero mucho, mucho. Y volver a casa cantando El Jorobado de Notre Dame a todo pulmón me da la vida. 

Tenías razón; estos dos días han sido increíbles porque he tenido dos de mis cosas favoritas con una de mis personas favoritas. Persas y sexo. ¿Cuándo se dan de forma tan perfecta ambas cosas? Gracias por venir a compartir mi mundo contigo y a sacarle fotos a todas las piezas del museo porque tu móvil es mejor que el mío. Y gracias por quererme tanto, que yo te quiero igual. 


Aeaeaaeeaaa. 


Te quiero, Bob. 

26 de agosto de 2019

Higher, higher; to where the skies end

Starset va a sacar otro disco. Yo ya. 

We are the lost and the silent, we are the shackled and small.
We are looking up at the giants, we are going to watch when they fall. 
Do you hear me?



Ya tengo el visado y una lista larguísima de instrucciones con lo que tengo que hacer una vez llegue a Tehran. Ayer tuve mi primera conversación en persa con alguien que no hablaba nada de inglés ni español, y si no fuera por Yasmin, yo ya estaría acabada. Pero al menos lo sigo intentando. Y tengo club de esgrima, si consigo entenderme con mi entrenadora. Y una tesis que escribir y un libro que revisar. Y se me acaba el tiempo para hacerlo todo. 



Está siendo un verano extraño. Bueno, pero extraño. Ahora que tengo el visado, los billetes y el seguro, estoy mucho más tranquila. Y estoy contenta porque estoy pasando mucho tiempo con Bob. María (que ya no es María, pero sí es María y yo me muero de risa, pero así son las cosas) está extrañamente cercana, Aguilar no me habla de la novia porque yo creo que ya no la tiene, sigo sin piso en St Andrews y mi contrato está firmado. 
El verano está siendo raro porque lo estoy pasando con gente que no esperaba, y a la gente que más me apetece ver la estoy viendo poco, pero porque shit happens. Está haciendo mucho calor y eso me repugna, pero lo pasamos bien en los cumpleaños de perritos. Supongo que todo lo agravaba la preocupación por el viaje (que si me pongo a pensarlo, me mareo), pero bueno. Ya está más cerca y más sólido. Me apetece, la verdad. Igual que me apetece terminar de revisar el libro y ponerme en serio con la tesis, que me da mucho miedo pero hay que escribirla. 

Enu me sigue acompañando; ese niño es lo mejor que me ha pasado en la vida. 
Y tengo el Hollow Knight al 105%, bitches. 



Es curioso que siempre quiero escribir, y cuando levanto la tapa del portátil, me doy cuenta de que tengo otras cien cosas que hacer y nunca escribo. 





Cosas que tienen que ver, mi taza nueva de Palopó es un búho que está cabreadísimo y eso me encanta.



EDIT: he publicado esto en el blog que no era y menos mal que me he dado cuenta por las etiquetas. Menos mal. Menos mal. Me maten, el ataquito al corazón que tengo ahora mismo. Soy gilipollas. Qué risa me ha entrado. 

9 de agosto de 2019

Time falls like moonlight

All the milestones in my Timescale are marked with different birds. 
And pretty much that's it. 


I swear to Satan in His Flaming Throne that I will start studying Persian from the 15th onwards. I do swear. 

2 de agosto de 2019

Bazm va Razm

I am going to be a horseback warrior. I will be up on the horse again.
Y ayer dejé Hollow Knight con un 90% completado, sin guía y en el primer intento.
Eh, o qué.

31 de julio de 2019

Be reborn on True Light (Lumen vs Numen)

No sé si esto será un éxito de ventas (en realidad, no creo que mucha gente lo compre), pero he descubierto que no me importa. El tema es lo suficientemente complejo y extraño como para asustar a más de uno, pero ya no me preocupa. Ese pedacito de ego se ha diluido en la belleza de aquello con lo que tengo la suerte, el privilegio de trabajar. Cuando mi pequeña contribución sea material, cuando la tenga en las manos, aparte de que I will indeed cry a river, me sentiré simplemente feliz de haber dado forma a algo tan hermoso. Porque lo he acercado a los cuatro o cinco a los que les interesará de verdad, y podré estar satisfecha, sabiendo que hice un buen trabajo. 

Todo en Joruney es precioso. Todo en el sufismo es pura y bella Luz. 

A veces no creo que sea real y que estoy viviendo una nebulosa extraña. Luego me doy cuenta de que la fecha de entrega se acerca y se me pasa rápido, rápido. 



Cosas que tienen que ver, ahora Coco y yo vamos a la biblioteca como cuando estábamos en cuarto de carrera y nos da mucha risa a las dos. Me alegro de haber vuelto a caminar esos prados de mi vida. Este es tu año, Coco. Yo sé que lo es. Si me han dado a mí el visado, tú apruebas las oposiciones, que cosas más difíciles se han conseguido. El Kung Fu nos acompaña. 



Cosas que tienen que ver, ¿ya se ha acabado julio?

22 de julio de 2019

Malhari

Cada vez que escucho esa canción pienso en Upazâma. Y, por lo tanto, pienso en Verethraqna. 



Vamos a hacer un recap rápido, RiME me partió en diez mil pedazos, me hizo llorar como no recuerdo yo haber llorado con ningún juego y me hizo no poder volver a tocarlo en bastante tiempo. Ya me pondré de nuevo, pero ahora mismo estoy completamente enamorada de Cabezoncito (o Kalala, como lo hemos bautizado en mi familia) y su maravillosamente triste aventura en Hollow Knight. Qué gusto esto de haber vuelto al mundo de los videojuegos. Gracias al Lemin. 



Me voy en septiembre, pero me voy. Voy a seguir cumpliendo 29 en Irán. 
Y es bastante complicando escribir mientras Sombra de Perros intenta comerse a sí misma a mis pies. Ahora se ha puesto en modo-alfombra, porque las dos odiamos el calor. Qué asco de verano. Como lo de Canadá salga bien, seré la mujer más feliz de la existencia. 



Yo iba a decir algo más, pero la tetera se ha puesto a silbar y se me ha olvidado. 

27 de junio de 2019

Pájaros de sal

Solo quería tomarme un momento para escribir lo muchísimo que me está gustando Rime y para confirmar mi intención de hacer que Enu (he adivinado su nombre antes de tiempo porque soy imbécil) y el Viajero se encuentren en algún momento. 

Y, del resto, mejor hablo otro día. 
Otro que me encuentre menos... menos. 

10 de junio de 2019

El 16 que pinté con esmalte de uñas

Estoy esperando a que termine la lavadora. Luego tengo que ir a donar unas bolsas a Salvation Army y me pasaré por Cottage Kitchen para ver a Beth. Después, me iré a la oficina, a sentarme en mi escritorio y a intentar escribir algo y no ponerme a llorar porque la voy a echar de menos como al respirar. 

Mi habitación ya es grande de por sí, pero ahora que tiene todas las paredes vacías, es gigantesca. Bueno, la que ha sido mi habitación desde el 31 de agosto de 2018. 
Quería escribirle algo a este piso. Porque, a pesar de que he llegado a detestarlo, esta habitación ha sido mi cueva y mi soporte. En ella han pasado cosas muy bonitas y, curiosamente, lo que más recuerdo es lo que se ha llorado aquí. Sobre mi cama hemos llorado muchos, y llorado de verdad. Porque ha sido un año que nos ha puesto a prueba. 
Pero también nos hemos reído mucho. En este piso han ocurrido, como digo, cosas muy bonitas. Y me sorprende que el número 16 que repasé con esmalte de uñas blanco todavía esté ahí, soportando el maravilloso tiempo escocés y resistiendo a pesar de todo. 

Voy a echarlo mucho de menos todo y, aunque sé que tengo que volver casi por obligación, la incertidumbre es todavía muy intensa. No sé qué va a pasar a partir de agosto de 2019, no sé qué va a pasar hasta diciembre, no sé qué traerá enero de 2020. 
Pero este piso se quedará aquí, testigo de que hicimos lo que pudimos por vivir lo más felices posible, con nuestros picos y nuestros valles. Con nuestro frío en los huesos y las arañas, los gatos visitantes y las múltiples fiestas. No muchas cosas han salido como las planeamos, la verdad. Pero yo sigo tranquila. Estoy triste, estoy contenta. Soy un jaleo ahora mismo. 


Y ha terminado la lavadora. 
Así que me tengo que poner en marcha. 

22 de mayo de 2019

TKMaxx

Gracias, mamá, por estos días comprando casas y cosas por diferentes localizaciones de Escocia. Gracias por recordarme lo que es importante y decirme aquello que, por lo general, sé pero no me apetece escuchar. Aquello que es la realidad imperante y que me da tanta rabia que me recuerden. Pero es que tengo tanto miedo al fracaso, que a veces me paralizo. Me quedo congelada, como un conejo al que le dan las largas. Y no sé si lo que estoy haciendo merece o no la pena. Y me pierdo, y me quedo atascada. Porque, de verdad, no sé qué hacer. 

Sin embargo, de tu boca siempre salen todas las verdades, aquellas que son más amargas y aquellas que son increíblemente dulces. Y siempre vienes a rescatarme con tus palabras de apoyo, comprensión y amor infinito. 
Por encima de todo, para siempre. 

Te prometo que te voy a buscar una casa en St Andrews. Este rincón del mundo ahora es nuestro, mami. Quién nos lo iba a decir a nosotras.

"Que un mojón pa ti".



Y quiero escribir esto hoy, recordándote a ti, la más grande de todas. 
Allá donde estés, allá desde donde nos mires, te echamos de menos, Abuela. Y te seguimos queriendo. 

17 de mayo de 2019

El "me maten" no se acaba

I just calculated I have, at this point and prior to today's writing session, 17,160/50,000 words. 


*Cries in me-cago-en-la-puta Spanish*

13 de mayo de 2019

A moment in time (I am a Mountain)

Soy una montaña. Ahora mismo, soy una montaña. Tranquila, fuerte, anclada al suelo y en paz. Nada puede moverme, nada que ocurra me alterará en exceso. Observo, contemplo y participo, pero eso no implica grandes cambios. Imagino que eso es lo que significa estar en paz con una misma. 
Y no creo recordar cuándo me sentí así la última vez. 

Lo que yo no habría imaginado jamás es cómo Nueva York iba a cambiarme por dentro. No sé ni siquiera si fue la ciudad; no tengo confirmación de que así sea, pero en algún momento desde que me subí al avión para volver y la noche del viernes, seguida de la del sábado, algo tuvo que pasar. Algo ocurrió, que mi cerebro hizo el click definitivo y todo se volvió calma. Pero calma real, calma estable y asentada, como el nacimiento de una montaña. 
Estoy tranquila y estoy bien. Quizá por primera vez de forma definitiva en todo el curso. He sido capaz de analizar todo lo que ha ocurrido en perspectiva, con frialdad analítica y con el corazón latiendo a un ritmo normal. Me he dado cuenta de muchas cosas y he dejado de echar culpas a quien no las tenía, yo misma incluida. 

Lo que ha pasado este año es, simplemente, la vida. Life happened. Y ha revelado ciertas partes muy desagradables, pero, si esto era una prueba, siento que la he pasado. 
Seremos lo que ella quiera que seamos y estará bien. Incluso si no somos nada. Porque todo lo que he vivido, estos recuerdos, estas memorias preciosas que he tenido y estos momentos que atesoro dentro de mí se quedan conmigo. Vienen al siguiente capítulo, incluso cuando el actual se acabe. Cuando se pase la página y no importe quién me sigue o quién se queda atrás. El recuerdo y la alegría de los momentos más importantes siempre me acompañará, y ese es el verdadero regalo con el que tengo que quedarme. 
No decir: "qué lástima que terminó", sino "qué alegría que sucedió". 
Ser capaz de valorar correctamente todo cuanto sucedió. Aprender de las experiencias más dañinas para que no se repitan, o para capearlas mejor cuando lo hagan; y, al mismo tiempo, darle luz a las más bonitas para enriquecerme. 

Porque yo sí tengo un lugar y unos brazos a los que volver. Siempre los he tenido. No ha habido un momento de este curso en que me hayan faltado. Por eso he sido y soy capaz de sanar tan deprisa. Porque esos brazos me estaban esperando, siempre esperando. 

Gracias a ellos y gracias a mí, ahora estoy bien. He dicho cuanto he querido decir, he pedido perdón y he recibido otro perdón y es posible que me haya regocijado en saber que estaba haciendo lo correcto, que estaba teniendo altura moral. Incluso cuando la respuesta no fue idéntica en forma o palabras, ha habido una respuesta. Pero no voy a valorarla como algo único, sino a colocarla en su sitio y dejar que la paz la invada y la incluya en este río de emociones que baja por la montaña. Hasta que se cristalice y se asiente como toca, junto a todas las demás. 
Y lo que tenga que venir, que venga. yo siego crujiéndome los nudillos a la espera del desenlace, si es que tiene que haber uno. 




10 de mayo de 2019

Tank!

Pero qué bien se está en casa y qué maravilla este frío que sigue haciendo en Escocia a 10 de mayo. 
Bueno, entramos en la última recta del año. Me voy crujiendo los nudillos, a ver qué depara este mes (además del encierro constante, que tengo que escribir).



Cosas que tienen que ver, esa maravilla que es la banda sonora de Cowboy Bebop.
Cosas que tienen que ver, esa maravilla que es Cowboy Bebop, en general.
Cosas que tienen que ver; Spike, qué hermoso eres, por favor. 

7 de mayo de 2019

Occidente/Oriente

No me lo puedo creer, pero lo he hecho. He encontrado el punto de fusión perfecto en el que Journey y el Recital de Hayy ibn Yaqzan de Ibn Sina convergen. ¡Lo he hecho!
Después de horas y horas leyendo dicho recital, que es más obtuso que la madre que lo parió. Está claro que el señor Sina se metía algo muy fuerte antes de ponerse a escribir (cosa que me parece perfecta, pero me ha costado muchas de mis no abundantes neuronas). 

Gracias a Bob y a la Marida por estar siempre al otro lado para soportar mis picos de euforia loca. 

*cries in histérica Spanish*



Me voy a seguir apuntando cosas antes de que se me pase. Zofia me quiere llevar a un concierto de clavicémbalo. Me maten. 

6 de mayo de 2019

The Heavenly North

"Bombón."
"Dime cosas."
"¿Te has dado cuenta de que es posible que seas la única persona en el mundo que sea capaz de hacer un libro de Journey y el Sufismo?"
"Ahora que lo dices, sí, Nadie está tan loco."
"Si alguien puede, ¡eres tú!"
"Ay... Te quiero mucho."
"Jajajaja, ¡bien!"



Que tengas tanta fe en mí me enamora, me anima y me da fuerza a partes iguales. 
El jartattack es intenso. Voy a tirar el ordenador por la ventana, y detrás voy a ir yo. Me bailan el Norte, el Centro y el Pa'dentro celestiales como si hubiera salido de una caricatura de los cincuenta.

Socorrísimo. 

4 de mayo de 2019

A skyline of stars and fog

Te quiero mucho aunque estés lejos. Te quiero mucho, mucho, mucho. Y tú me quieres a mí. Y, según un estudio de la Universidad de California, las parejas que se quieren mutuamente son más felices. 



Gracias por seguir haciéndome reír como lo haces. 
¡Qué ganas tengo de abrazarte otra vez y de que me beses en la frente como Tristan hace con Yvaine!





Cosas que tienen que ver, may the forth be with you. And Dark Horror from Spawn collection. 

28 de abril de 2019

The Hero's Journey

Jehova Chen es una persona que me encantaría conocer y entrevistar. Simplemente una llamada de teléfono, un correo, una conversación por Skype. Porque quiero darle las gracias, a él como director y como representante de thatgamecompany, por crear el juego más maravilloso de la historia. Los habrá mejores, los habrá peores, pero ninguno será como Journey. Journey es algo más, es algo que trasciende la carne, el hueso, el espíritu.

Y estoy escribiendo un libro sobre él. 

Después de un bloqueo de meses, tengo que agradecerle a Alberto que estuviese apoyándome cuando más dudas tenía, cuando me asaltaban los miedos y me paralizaban los dedos sobre el teclado. Ahora pienso en cómo estaba el texto hace tan solo una semana y me da una mezcla de vergüenza y risa. No puedo creer el aspecto tan fantástico que tiene ahora. Y aunque esté lejos de estar terminado o de ser perfecto, sé que lo estoy haciendo bien. 
Lo siento, dentro de mí. Lo estoy haciendo bien. 

No me puedo creer que vaya a pasar de verdad, pero así es. Tampoco puedo esperar a tenerlo en las manos. Pero, de momento, toca la parte más dura, que es trabajar. Aunque, en realidad, si trabajar significa tener esa música y esa vista la mayor parte del tiempo, cómo quejarme. 



Their all in their paths, searching for something.
Jehova Chen, 2013.

22 de abril de 2019

El Simurgh de Maragha

Hoy te he tenido en las manos. 

Seré honesta y confesaré que me he saltado las restricciones de la Morgan Library un poquito, pero la archivera me ha dado permiso. En teoría, solo tenía autorizado acceder al folio 55r, pero esto es lo que pasa cuando alguien deja un manuscrito en mi poder y se da la vuelta: que se me va de las manos. Literal. Así que llevo un buen rato pasando las páginas y maravillándome con el Manafi' al-Hayawan, con lo poquito que puedo leer y con las increíbles imágenes, aquellas que nunca soñé que vería personalmente. 

Pero como siempre desde que empezó este curso 2018-2019, la realidad académica se impone y no puedo sino seguir fascinándome. Es que lo nuestro es ver libros y manuscritos, es que a esto nos dedicamos quienes hemos escogido el sendero de la investigación. No puedo evitar seguir sobrecogiéndome, preguntándome quién soy yo para que un conservador de tamaña institución me autorice a ser una de las pocas privilegiadas que jamás tendrá este libro en las manos. 

Deja que hable de ti, Simurgh de Maragha. 

Eres la primera de la que tenemos noticia, la primera ilustración que se hizo de ti en un manuscrito. Tu fecha está entre 1297-1298 y 1299-1300, no lo sabemos. Eres bellísima. Estás adornada con tinta de oro, azul, roja, verde, rosada y delineada en color negro. Estás de pie sobre una isla, aquella que todavía no he encontrado (y que, según leyendas, nadie puede hallar). Tus plumas parecen estar en llamas o emular a las nubes. Tienes los ojos rojos y abiertos. El mar y la preciosa curvatura de sus olas te rodea, te esconde y te protege. Y aquí estás, en un atril delante de mí, mientras escribo estas líneas. Es algo que me cuesta creerme. 
Cada momento en que no estoy mirándote, tengo la sensación de que pierdo el tiempo. De que no es real, de que estoy en un sueño difuso del que me despertaré, de vuelta en St Andrews, y pensando si alguna vez estuve allí y te tuve delante. Pero así es. Y cuando vuelva a abrir mi ordenador, tal vez esta noche, tal vez cuando esté en Escocia, miraré tu rostro y pensaré que sí, que fue real. Que te vi, como he visto a tantas otras, como tengo el absoluto privilegio de contemplarte. 

Parece que todas las Simurgh que veo sean dignas de mención... y es que, para mí, así es. Todas ellas representan un momento especial de mi vida, un lugar en concreto, un punto en mi memoria y en mi historia que quedará para siempre en mi recuerdo. Alguien escribió 'Anqa en un extremo del folio, como suerte de aclaración. Pero ambas sabemos que tú no eres 'Anqa, aunque a ella también la queremos. 

Mi marida me ha dicho que está muy orgullosa de mí. Bob se emociona cuando yo me emociono. Hay mucha gente que está feliz por mí, orgullosa, contenta, emocionada como yo. Gracias, a vosotros, de verdad. 


Simurgh y yo vamos a seguir disfrutando un poquito la una de la otra. 



Qué día tan especial para mí. De verdad. La primera de todas ellas, la que abriría el camino. El Simurgh de Maragha. 
Estoy convencida de que, que sea día 22, no es ninguna casualidad. 

18 de abril de 2019

Zen Zen Zense - L.I.F.E.

She wrote it on the bathroom wall in her favourite shade of lipstick.
L.I.F.E.



No he dejado de darle el coñazo a Aguilar del Campoo en todo el día, entre vídeos y fotos, de todas las maravillas que me he encontrado en el MET. Pero es que me da cuerda y yo me emociono. Y de repente, cuando estaba dibujando el cuarto o el quinto textil (el cuarto, estoy casi segura), me ha llamado para que hablásemos un rato. Yo creía que me daba un jari, porque pensaba que había pasado algo. Pero entonces me ha dicho que no, que me llamaba por el puro goce de hablar. Así que me he ido sentado en diferentes partes de las salas de arte islámico hasta que ha venido un señor a decirme que dentro del museo no se permitía el facetime

Me ha hecho mucha ilusión que me llamase. Igual porque ni en un centenar de años esperaba que pasase. Y, como gracia, cuando se nos ha cortado la conversación mi teléfono ha seguido reproduciendo la música en aleatorio y se ha puesto a sonar Zen Zen Zense



A ti sí que te he dado el coñazo a base de bien, entre Yaza por la mañana y Simurgh durante el resto del día. Pero qué quieres, si me das alas. Si me das vida. Si me encanta hablar contigo por teléfono y cada vez que decimos "¡mas no!" me da la risa tonta. Qué bello y precioso y aterrador va a quedar nuestro Yazata. Porque es mío, pero una parte importante también es tuya. 
Ya lo tengo todo planeado. Bueno, casi todo. Debería escribir otro libro antes. Juro, de verdad, que mañana me pongo. 




Qué día tan magnífico. De verdad. 
Esta oportunidad, esta maravilla que estoy viviendo es posible gracias a mamá, que se dejaría cortar los brazos con tal de que yo pudiese experimentar un pequeño porcentaje de todo lo que hago. Gracias, de corazón, porque sin ti no habría sido más que un sueño. Y el sueño sigue siendo, pero lo vivo, lo estoy viviendo (ojeras, bolsas de la compra y jetlag incluido). 
Esto es un privilegio, entrar en el MET con un pase de invitada como investigadora es otro privilegio, la casa en la que estoy es el tercer privilegio, la vida y los amigos que tengo son el cuarto, mi pájara y poder correr detrás de ella es uno de los privilegios más grandes del mundo. 

Hoy he entrado en el Metropolitan Museum a las 10:00, cuando han abierto, y he salido a las 17:15, cuando cerraban. No he comido; se me ha olvidado. Me he pasado siete horas en el MET y no he visto más que la sala de islámico, la de Próximo Oriente (había que saludar a los Lamassu, por supuesto) y la exposición de los imperios. Qué tienda de regalos más lamentable, por cierto. 
Hoy he estado rodeada de Simurgh, por todos lados. La he visto hasta en la sopa -de dónde habéis salido tantas; de dónde-, escondida y camuflada en lugares que me machacan la vista. La he encontrado, magnífica, en el azulejo de siempre (esa única pieza que no puedo ver, porque no me van a desmontar la pared entera solo a mí). La he descubierto en la funda del arco de Khusraw Parviz, después de aplicar luz e ha revelado en tinta dorada, allí donde yo creía que la estaba viendo pero no estaba segura. Me he sentido como una cazatesoros. 
Hoy he sido tan feliz, a pesar de no comer y caerme de sueño por las esquinas. 
Y mañana, otra vez.



She wrote it on the bathroom wall with her favourite shade of lipstick. 
L.I.F.E. 





Cosas que tienen que ver, la operación LOTR Experience 2019 ya está en marcha. Al que se le escape algo, le arranco los brazos, le corto la lengua, hago picadillo con toda la carne y se lo meto a la fuerza garganta abajo usando los puños. 
Hombre ya. 

17 de abril de 2019

While you count sheep

Esto es de locos. 
Estoy en Nueva York. Estoy en un apartamento del Upper East Side, en la 2nd Avenue con la 76th (o la 75th, o la 77th, la verdad es que ahora no lo recuerdo de memoria). No solo estoy en Nueva York, sino que esta mañana me he levantado a las 5:30am para salir a buscar un paquete de mi hermano al Royal Mail, me he encasquetado más de veinte horas de viaje y ahora estoy en Estados Unidos. 

En qué momento. 
Estoy en Nueva York. Es que estoy en Nueva York. 
Me da vueltas la cabeza porque aquí estoy, aguantando el jet-lag y las ganas de dormirme porque no quiero despertarme a las 2am como un búho. Pero mañana, cuando de verdad me despierte y baje a desayunar al café al que ya le he echado un ojo al salir del metro, me va a dar un ataque al corazón. Especialmente porque después voy a dirigir los pasos hacia el Metropolitan Museum para  que me den un pase de investigadora y trabajar con ellos. 
Pero cómo de loco es esto. Cómo de loco. Madre mía. 



Quiero hacer una lista de cosas que pasaron desde ayer a las 2pm, más o menos, hasta que he vuelto a coger wi-fi en el apartamento. Solo quiero dejarlas aquí. 
Theresa se fue. A Lukas y a mí se nos fueron más de tres horas entre té y conversación, comentando algunas cosas más serias que otras, encontrándonos a su spirit animal que resulta que es un cuervo, dándonos muchos abrazos. Vi a Rebecca, conocí a Borrows y me comí la tarta de zanahoria que me había preparado. Volví al pueblo y nos fuimos a cenar Beth, Lukas, Pete y yo. Y fue bonito. No dormí apenas. Desayuné de aquella manera. Menos mal que fui al aeropuerto una hora antes de lo que había planeado, porque mi visado no aparecía en el sistema y he tenido que correr como el gif del EVA-01 para pasar el control de seguridad y llegar a mi puerta de embarque. Me han dado helado en el avión. He visto Nueva York desde el cielo. He pasado dos horas en la cola de inmigración, sin manera de avisar de que estaba bien, y una mujer española amabilísima me ha dejado su teléfono para mandarle un par de mensajes a mamá. No me he perdido en el metro (aunque he hecho bastante el idiota en el aeropuerto). He conseguido wi-fi de nuevo y he visto las fotos que Beth había subido. 
Y ahí me quiero parar. Porque, si estoy entendiendo bien el mensaje, quiero que sepas que yo a ti también. 


Ovación de gala para el señor Aguilar del Campoo, sin duda. El vídeo de la kata me da mucha paz, aunque sean movimientos bastante energéticos. Será porque él, últimamente, también me ha dado mucha paz. 



Echo de menos estar en casa, pero la verdad es que estoy muy bien. Y verás mañana, cuando me levante habiendo dormido. 



The Sandman gonna flip when he comes through.
While you count sheep I'll give them music to jump to. 

16 de abril de 2019

El cepo

No es por la canción de Dikers, sino porque no tengo imagen más clara en mi cabeza ahora mismo. Un cepo para osos, de esos con los dientes serrados que aparecen en todos los dibujos animados y en algunas películas. Eso, alrededor del cuello de alguien. No sé si es el mío, no sé si el cepo se está cerrando sobre la burbuja, sobre el cuello de María, sobre el de todo el mundo a la vez. 
Sé que esta semana, los últimos cuatro días en concreto, me han puesto a prueba. Y no estoy muy segura de haberla superado con elegancia. Quiero decir, no me he muerto, pero tampoco es que esté yo en el mejor de mis humores. Quizá porque estoy cansada y todavía no he podido reponerme como Dios manda. O porque me va a tocar hacerlo en un avión de siete horas a Nueva York donde, espero, me recibirá otro poquito de mi pájara y veré manuscritos, piezas y a personas que nunca imaginé que vería. 



La conferencia fue regular. Fue bien, fue mal. Depende de cómo lo piense y cuándo lo piense. No puedo evitar pensar que, tal vez, quedé como una idiota delante de algunas personas importantes. Que si le doy otra pensada, en realidad no me importa demasiado porque hubo muy buen feedback por parte de varias de esas personas importantes. Pero quizá la opinión de mi directora es la que pesa más sobre mis hombros. No estoy muy segura de cómo tomarme estos días. 
Pero de lo que me alegro es de haber tenido a Yasmin a mi lado cuando la necesité. Y de seguir teniendo a Simurgh detrás de mí cada vez que giro la cabeza. No iba a ser todo perfecto y está claro que me queda muchísimo por aprender. Pero... no sé. No lo sé. 

Es posible que influya mucho el hecho de que no he podido hablar de ello (ni de nada más) tranquilamente con mi gente, en la soledad de mi cuarto, porque todavía tengo a mi invitada conmigo. Todavía, en el más riguroso directo, porque está sentada en la silla de Eunjee a mi izquierda. No es que no quiera que esté aquí; lo he pasado de maravilla con ella y la quiero mucho. Pero creo que, después de la conferencia y previo al viaje a Nueva York, yo necesitaba estar tranquila y sola. Hablar con la gente de casa y estar tan en contacto con ellos como yo hubiese querido. Y no he podido, porque he tenido que estar "ocupándome" de alguien más. Alguien que, encima, todavía no se va. Que quiero irme a hacer mis cosas, coño. Sola, solita, sola. 
Ahora me escapo a las escaleras y le mando un audio de cinco minutos al Flaco y otro a la Marida. Pero todo esto me está suponiendo un gran estrés. 



Gracias, Lukas. Gracias por pasearte conmigo ayer para que yo pudiese despresurizar un poco, gracias por las patadas a los árboles y por todos los abrazos. Eres un amigo extraño, pero eres un buen amigo. De verdad. 
Y gracias por estar conmigo cuando se desató todo el drama (más). Ahora soy yo la que no tiene ni idea sobre qué hacer con Rocío, después de recibir el mensaje de Jurado. Por favor, calma y sosiego, tranquilidad, ¡o cualquier cosa, coño! Además, como yo no soy de calentarme la cabeza, ni nada... Vamos a respirar cinco minutos y a evitar pensar en asesinatos múltiples. 
Por favor. 



Y contigo. ¿Qué hago contigo? Qué, si no tengo ni idea de si quieres verme, de si no quieres verme. No sé absolutamente nada. El timing ha sido muy desafortunado, pero es que si no me llamas, yo tampoco voy a ir. Ya tuve bastante el semestre pasado. Y me voy mañana, lo sabes. Esto no es una advertencia ni una amenaza, es un recordatorio. 
No me digas que no estuve ahí para ti, cuando me tuviste en la puerta de al lado y no quisiste llamar. 



Hoy me explota la cabeza.
Hoy, definitivamente, me explota la cabeza. 
Cuando Theresa se vaya y yo me vea pasando la aspiradora en mi cuarto y haciendo la maleta, SOLA, todo irá mucho mejor. O eso quiero pensar. 

El cepo, ese maldito cepo. 

10 de abril de 2019

For the time being

Pues se activó la trampa, pero no era para mí. 
A veces me pregunto cuál es realmente mi papel en esta burbuja, si es que tengo alguno. Me da tremenda curiosidad el curso que viene. Pero tremenda, tremenda curiosidad. 



Cosas que tienen que ver, El violinista de Hamelín. 

9 de abril de 2019

Volar, volar. Volar, volar

Eso de 'cuando menos te lo esperas, va la vida y te sorprende' lo estoy diciendo últimamente mucho y no dejo de preguntarme dónde estará la trampa. Seguro que aparece en otro fin de semana de esos de poner los ojos en blanco hasta que duelan, en alguna otra torpeza emocional/amistosa que viene sin mala leche, pero jode igualmente, en la cara de idiota que se me queda cuando leo y veo algunas cosas que desfilan por delante de mi pantalla. 

Tiene que haber trampa en alguna parte, pero, de momento, lo único que veo es al más hermoso de los pájaros peinándose las plumas porque el domingo nos toca subir al escenario a contar un par de cosas que, creo, son interesantes. 

Nos lo vamos a pasar bien.



Vente conmigo, a mi vera, y fundamos las estrellas. 
Que aún nos quedan primaveras para abrirnos y volar. 
Volar, volar. Volar, volar. 
Volar, volar. Volar, volar. 



Cosas que tienen que ver, hoy he puesto mis últimos cafés en CK y han sido para Steven y Marten. Evidentemente, el día ha sido para cortarse las venas o para cortárselas a alguien, pero ya estoy sentada en el refugio de mi oficina, a salvo de más locuras de cafetería. Al menos, durante un tiempo. 
'See you in January'. 
Goddamn, you will. 

6 de abril de 2019

Clouds

Esto me lo acaba de mandar mi persona favorita en este mundo.
Mi hermano.

Y me apetecía escribirlo.

If I could just look up, I'd see him looking down. 
I know my grandpa is proud.
I am my brother's keeper. 
I'll be there for my sister. 

5 de abril de 2019

Que fuese mucho no quiere decir que estuviese bien

Hace menos de una hora le he dicho a mi mejor amiga que todo me daba más igual porque, literalmente, "estoy cansada de querer tanto, que no quiere decir que haya estado queriendo bien". Y creo que es la reflexión más útil que he hecho en este año académico. Porque me cansé de querer y quise mucho, pero eso no significa que el sentimiento estuviese ni bien expresado, ni bien llevado. Evidentemente, no estuvo bien llevado porque con echar un vistazo atrás la verdad se revela por si sola. 
Pero el hecho de haberme sentado a pensar que no he sabido querer bien, ya no tanto para las otras personas como para mi propia estabilidad mental, me ha dado paz. Ha conseguido que 'me cambie el chip', sort to speak, y que realmente, por primera vez en meses, todo me dé igual aquí, en la pequeña burbuja. En el mejor sentido de todos. En el sentido que, al parecer, debía ser.

Soy muy torpe y bastante tonta. Pero aprendo. Y eso no me hace menos torpe ni menos tonta, pero me hace mejor. Porque soy capaz de darme cuenta de qué partes tengo que trabajar a partir de ahora. Y eso, qué queréis que os diga, me hace sentir mejor. 

Quizá porque el viaje a Irán es inminente y porque sé a ciencia cierta que no estaré aquí el año que viene. Quizá porque sigo esperando ese gran gesto o esa señal por parte de Mary of the Agonies, una señal que cada día espero menos y que, en verdad, no tengo demasiadas esperanzas de que llegue. Pero estará bien. Todo estará bien. Todo está bien. 



Qué alegría, qué buen día, que bonito tenerte. 

31 de marzo de 2019

Donde sale la palabra "arpegio"

"Me gustas tanto", me dijiste hace dos días. Tú también me gustas a mí, mucho. Me gustas con mi familia, me gustas cantando en el coche, me gustas berreando haciendo como que te sabes la letra de alguna sevillana, y pones cara de sentío

Quería escribir, de forma un poco más bonita, el recuerdo de nosotros juntos, piel con piel, en el sofá. Con tu cabeza apoyada en mi pecho y hablando de tantas cosas, algunas más importantes que otras. Combinando las palabras con besos, con caricias, con algún que otro mordisco. Te quiero mucho y me gustas sobre mi piel. Te lo dije, aunque ya te lo había dicho en otras ocasiones; yo no sabía que se podía disfrutar tanto con nadie. Tú me ayudaste a descubrir esa parte de estar en pareja. 
Nunca me cansaré de abrazarte. ¿Te acuerdas?


No solo soy yo la que te quiere; ellos también te quieren mucho. Yo creo que siempre te has hecho a la idea, pero ahora lo sabes a ciencia cierta y que te emocione a mí me emociona. 
Te quiero. Muchísimo. 




Hoy me he dado cuenta de que ya no echo de menos a la gente de St Andrews. Al menos, no como pensaba que lo hacía. Y es que mi mundo es otro, o así lo siento. No me arrepiento de los mensajes que he enviado, ni de querer lo que quiero. Pero es que mi mundo es otro. 

29 de marzo de 2019

Espantajería

Uno de los momentos más bonitos de este 2019 y posiblemente de mi vida será esa mañana de miércoles, 27 de marzo, cuando mi mamá y yo fuimos a comprar ropa para Irán. Sé que tiene miedo, que se preocupa terriblemente por lo que me pueda pasar y que, si fuese por ella, quizás yo no me iría. Pero también sabe que tengo que hacerlo porque, además de que es lo que quiero, también es lo mejor para mí. Así que verla encerrar todos sus temores y meterse de lleno en esta nueva aventura conmigo me conmovió y me hizo sentir orgullosa a partes iguales. Me enseñó, una vez más, todo lo que me quiere. Me lo demostró simplemente metiéndose en aquel chino conmigo (que vaya tela, la experiencia, la señora loca y los dieciocho pañuelos de colores) y eligiendo ropa que era "demasiado corta" o que "tenía mucha espantajería". 

Gracias, mamá. De verdad, de corazón. Ya eras una grande en mi corazón, pero es que te superas cada año que pasa. 

26 de marzo de 2019

"Yo me acuerdo de todo"

a) Lo más estúpido que hemos hecho es posiblemente el máster, pero aquí estamos, seis años después y más casadas que nunca. Así que gracias, UCM, por regalarme a una de las mujeres más estupendas y retrasadas que podría desear. 
Pero cómo me gusta ir a tu casa a beber vino y comer como una cerda, joder. Me das vida. 

"Que yo me acuerdo de todo, ¿eh?"



b) Tú eres maravilloso. Gracias por quedarte conmigo todo el día de ayer, en esa mañana que empezó siendo de las peores de mi vida y acabó con un alivio que me hizo desinflarme, por lo menos, cinco kilos. Gracias por coger el teléfono y estar siempre que te necesito. Siempre, de alguna u otra manera. 
Te quiero, mira que te quiero. Y no sabes lo que me enorgullece hablar de ti, de nosotros, cuando estoy en St Andrews. Somos goals, al parecer. Y estoy tremendamente cómoda con eso. 



c) ¡La Euro-turra! Si me sigues instruyendo en los futuros, cena lengua muchos más días. Que sí, que cuando estés empezando a darme el coñazo, ya te daré una colleja. Eres el mejor. Eres The Boludest




El mundo puede irse a la mierda, que me va a pillar en Irán. 
Ahora sí que sí, me voy. ¡Me voy!

20 de marzo de 2019

Ampyx - The Adventure

*picture of a snowy mountain range enters my phone*

(Reaper) Oh, look at those peaks. So beautiful! I truly appreciate your thoughts on sending mountain pics.
(Taki) Always! Gotta give you strength for the paperwork!
(Reaper) Hahaha, you are a legend.



So this happened two minutes ago. I love him so much. 

19 de marzo de 2019

Flaquether

¿Has visto esta sonrisa? Es de felicidad.



Te llamo y acudes, me llamas y voy. Hace seis años aproximadamente que es así, aunque en realidad hemos estado juntos desde hace diez. Y hemos vivido tantas cosas, hemos estado presentes (literal y figuradamente) en tantos momentos relevantes de nuestras vidas que no puedo no recordar sonriendo. Recordarnos haciendo el imbécil y llorando de la más pura tristeza, dando saltos hasta las cejas de alcohol y corriendo por la calle a las tantas de la noche porque perdíamos un tren. Ahora has venido a mi burbuja para llenarla de té, tacitismo y boludismo completo. Has venido a dejar tu impronta en un banco frente al mar que se ha convertido en uno de mis sitios favoritos de St Andrews. Igual que tú eres una de mis personas favoritas. 

Hemos tenido de todo. Te vengo a decir, esos dramas de noche con las luces a punto de apagarse, las cervezas y los mojitos, la comida (no paramos de morfar porque es lo único que sabemos hacer), los paseos, las historias pasadas por agua y los paticos, y los monetes. 

Gracias, Flaco. Flaco con mayúsculas en el teclado y en mi vida. Gracias por seguir siendo esa persona con la que nunca se me acaban los temas de conversación, ese hermano mayor que me regaló la vida, ese boludo (the boludest) que ahora trabaja para el Parlamento Europeo, uno de mis más grandes orgullos. Nuestro fin de semana me va a sacar sonrisas de aquí, a Lima. Porque cuando el tiempo haya pasado y las fotografías se hayan asentado como recuerdos, me pondré a pensar en una de nuestras tantas conversaciones y añadiré este fin de semana a nuestra historia personal. A nuestra historia vital. Engordaremos los recuerdos cuando quedemos de nuevo y nos acordemos de todo lo que hicimos hace apenas veinticuatro horas. Ahora que conoces mi mundo actual y te puedes cagar en él conmigo, con toda la mala leche que nos quepa. Ahora que seguirás esperándome en Madrid, aunque pasen los años. Por lo menos, cinco. Enhorabuena, mamón. 



Qué falta nos hacía este finde. ¡Y el sábado nos vemos!



"No quiero que pienses que soy idiota."
"Ese tren zarpó hace mucho."



Flacos together, flacos forever. 
We're friends but so much more. 
Not matter what comes, we will face the weather.
Flacos to the core. 

16 de marzo de 2019

"No sé si estoy preparado para ser mayor"

Queridos hermanos, en verdad os digo... irse a la mierda, haced el favor. 



Pocos discursos han conmovido más a las masas, Flaco. No quiero que te vayas, pero gracias por las últimas 24 horas y por las más de 48 que quedan por delante. Gracias de verdad. Ahora ese banco se queda con uno de los mejores recuerdos de mi estancia en St Andrews. Y el cielo, y el mar, y las nubes. 
Luego ya nos quedamos nosotros con el perezoso, los gatos del pájaro y el gato de la piscina.

En serio, gracias por seguir siendo mi hermano y ayudarme a ver las cosas en perspectiva.