30 de julio de 2021

¡Aféitate!

Hoy en la radio han puesto Just the way you are y yo, que tengo el romántico subido y la rodilla hinchada, me he acordado de que esa canción estaba en un disco que me grabaste, hace casi once años. Casi once años, ahí es nada. Y hoy estamos haciendo bromas porque marido cársel.

Te quiero. 

24 de julio de 2021

¡Sigue caminando!

Ayer Yassi terminó oficialmente y yo pensaba en darle un abrazo, uno fortísimo, aunque está a muchos kilómetros de mí. Estaba guapísima, como siempre, rodeada de sus globos y con su copa en la mano.
 
PhinisheD, amiga. 
Claro que sí, aziz-e delam. Pero lo que me calentó el corazón todavía más es que, incluso en su celebración y en su alivio, seguía teniendo palabras de aliento para mí. Me dijo que no me rindiese, que siguiese nadando, que las cosas llegan a un final aunque a veces nos parece que no lo hagan. Especialmente cuando estás metida hasta la frente en todo el meollo. 

Gracias, Yas. De verdad. Te prometo que terminaré, que seguiré nadando. Y le van a dar por culo a este país, a los visados, a todo lo que me está quitando la vida a pellizcos. Porque pase lo que pase, mañana será otro día. 

22 de julio de 2021

20 de julio de 2021

Dicen por ahí

No soy yo escuchando Sinvergüenza y acordándome de Yaza y de la madre que lo parió. No soy yo, es otra persona.

Ostras, vaya encontronazo con el pasado en esta esquina de mi vida. 

Si yo soy hiper natural.
Un bicho de lo más normal.

Anahita persiguiendo a Yaza para que Vayu-Vata no le regañe. Ay, qué maravilla. 

8 de julio de 2021

Mystline

Que esta canción me acune en las noches que pasaré sola y me ayude a recordar que en este mundo queda gente buena. Gente que quiere ayudar, gente que quiere ser amable. Como la mujer que nos ha hecho la PCR, como la señorita que nos ha atendido en la joyería o los tres camareros de Mozza. 

"Al final, siempre ganan los buenos", me has dicho, aunque estábamos hablando de otra cosa. Me duele lo mucho que voy a pensar en ti estas próximas semanas. Y no tener muy claro qué tipo de respuesta nos vamos a encontrar me agobia y me asusta. Pero qué le vamos a hacer. Tengo que sentarme con mi cabeza a acariciarme despacio la espalda y a repetirme que todo va a estar bien, todo va a estar bien, todo va a estar bien. 
Que nos veremos pronto. Que acabaré la tesis pronto. Que llegará octubre y haremos aniversario, que llegará noviembre y cumpliré treinta y uno, que llegará diciembre y volveremos a casa por Navidad. Que el tiempo, para bien y para mal, pasa.



Qué maravilloso es Samurai Champloo, y qué bien tener a Nujabes para que me acompañe mientras voy de pájaro en pájaro. 

5 de julio de 2021

Os deseo

En la actuación en directo de Eclipse de mar, Joaquín Sabina decía "amigos como él os deseo" para referirse a Juan Carlos Baglietto. Esa frase se quedó conmigo y la verdad es que la uso bastante. Porque me la creo, la verdad. Porque pienso que uno de los aspectos de mi vida en los que soy más privilegiada es en mi familia escogida, en esos amigos que tengo. 

Ahora que estoy bastante más triste y que me tengo que quedar sin compañía un tiempo, a saber cuánto en realidad (y a saber lo que nos dicen, porque yo sigo pensando que va a seguir siendo que no), he estado haciéndome un plan para estos meses que vienen. Llenando mis días de cosas pequeñas que hacer, obligándome quizá a salir a por un batido en el Daily Grind, a pintarme las uñas de los pies, a comprar velas. La tesis no hace falta que la recuerde. 

Pero mis amigos se han ofrecido a llenar el tiempo en la medida que puedan. Con llamadas, volviendo a comer y desayunar juntos, asignando un momento del día para contarnos novedades (pocas). Es que les quiero. Es que me llenan. Y aunque no vayan a ser los meses más fáciles y las semanas que están a punto de empezar sean para tirarse de cabeza contra las vías, valdrá la pena. Quiero prometerme disfrutarlas. Quiero no pasar estos catorce futuros días demasiado triste, quiero llenarme de ellos y de él, hasta que vuelva a abrazarlos a todos. 

Os quiero y me queréis. Joder, qué privilegio. 



Te esperaré aquí, porque esta es nuestra casa. Porque sé que vas a volver. No tengo ni idea de cuándo y tú tampoco. Pero volverás. Y yo estaré aquí. Te prometo llorar poquito y reírme un poco más. Te prometo seguir yendo al gimnasio y no dejar que se me caiga la casa cuando pasen las ocho. Te prometo ser valiente y no desear la felicidad de los demás. Prometo mandarte el anillo cuando lo tenga. 

Te prometo. Me prometo. 



Cosas que tienen que ver, va a sonar rarísimo pero cuando me pongo la 'bata'/polar, como tiene esos colores, siento que el EVA-01 me da un abrazo y me dice que vamos a estar bien.