If I had a dime every time someone tried me and my pride...
I'd be richer than I am right now.
¿Que eres celíaco? A ver el carnet.
"Cuando algo es diferente, o le das superpoderes o..."
Vaya genio eres. Que nadie te convenza de lo contrario, ni siquiera tú.
But I live a life so sublime, all the fire's on my side
Watch it flicker in my hand like "Wow!"
Estas son diez cosas que han hecho de este noviembre uno de los mejores que recuerdo. Aunque el orden no es relevante, sí quiero que sean diez, porque "diez cosas buenas antes de dormir". Clásico.
La Lanzada es lo primero que me viene a la cabeza, y eso hace que automáticamente se reproduzcan imágenes de la búsqueda del tesoro en casa, con mi sombrero de "Maestra de Djinn-mon", la luz, la pesadilla, el rey de todas ellas... Así que vamos a decir "el cumpleaños", porque lo engloba todo bastante bien. Por otro lado, tenemos a Ismail con todos sus atuendos de colores, uno por cada asiento, siete en total. Ver a Yun, ver a mamá, verte a ti en sueños una vez más. Ya llevamos tres.
Hablar con Martita un total de dos horas y pico porque yo tengo vacaciones y en Tokyo no es tan tarde. Llamar a Titi mientras conduzco, pero eso tiene una entrada entera porque, como ella, es una historia aparte. Mis días malos han sido pocos, y mi fortaleza crece poco a poco, y aunque eso no sea "una sola cosa", considero que debo valorarla como se merece. Mis progresos son importantes. Bueno, aunque no haya terminado de ser constante con el NaNo, por lo menos hemos reconducido a R y a A (tanto que a R le hemos cambiado hasta el nombre), y ahora tengo ganas de que sean las 16:00 para ponerme a escribir.
Quedan tres.
Bueno, para mí haber incorporado el "hola, bonitos" como saludo cuenta como cosa buena, buenísima. El disco Nurture es un must de 2022, pero lo vamos a contar igual. La conversación con Yun de hoy también merece mención aparte, porque soy especial, me creo especial, disfruto de ser especial. Me emociono al recordar cómo sigo hablado de Ella, de ti, con tanta pasión después de... madre mía. Después de nueve años. En septiembre de 2023 se cumplirá el décimo aniversario desde que decidí amarte con locura, con entrega salvaje, con ira casi, sin que me importasen las consecuencias. Como una demente. Y nueve años después, todavía te profeso ese amor, tan intenso que duele.
La última tiene que ser que he comido de forma excelente. El otro día leí un cartel de la campaña contra el hambre de este año, decía que comer no debería ser un privilegio. En mi caso, tengo la suerte de que no lo es, pero estoy empezando a considerarlo como tal. Así que decido valorar la comida como algo que celebrar de un mes memorable.
Y el té. Oh, mi kilo de té traído directamente de Turquía (porque no sé si viene de Ankara o Estambul), porque cuando se trata de zumo de hojas secas, me vuelvo completamente insoportable.
And I promise you, I'll stand my ground.
But I'm not to fight all the lives that reside within these heights.
Don't you worry love, you have my vow!
El gen cebollístico. En jinn cebolla, ese es el mío. Mi espíritu animal es una fucking cebolla, porque cuando mi gente pasa mucho tiempo conmigo, termina llorando. De la emoción, del alivio, de la confianza... es decir, no es que yo les haga llorar por las cosas que les digo (que a veces también), sino que terminan abriendo el grifo y yo con esta cara de cebollino constante.
Pero si esta cebolla es capaz de hacerte llorar de risa, a ti, a quien sea que estás leyendo esto, o de que llores en mi hombro y te sientas mejor... pues cebolla a tope. Cebolla para siempre.
This world is mine!
The cretins will have a season and they will shine
But we can become a beacon for all the blind
A demon of my allegiance can burn the sky
This is so divine!
Cosas que tienen que ver, Samara se ha personificado en el demonio de la radio, es fabulose y algún día alguien tendrá la entereza de doblar el espinazo ante elle, el auténtico Príncipe de este mundo.
Más cosas que tienen que ver, el demonio de la radio, en realidad, soy yo. Baso mi personalidad, como dicen mis ñiñas, en ser el demonio de la radio.
