Se le nota en la voz, por dentro es de colores. Y le sobra el valor que les falta a mis noches.
Y se juega la vida... siempre en causas perdidas.
Ojalá que me la encuentre y entre tantas flores. Ojalá que se llame amapola, que me coja la mano y me diga que sola no comprende la vida, no.
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