Yo también quiero, amiga.
Quiero. Y te quiero. Y sí.
Y lloraremos millones de veces por lo feliz que me hiciste hoy.
Hola, ¿qué tal? ¿Cómo te va? Qué frase más vulgar con la que me voy a presentar.
Quiero conocerte. Cambiarías un poquito de mi suerte.
Sigue la corriente, el impulso de tu piel nunca te miente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario