16 de noviembre de 2015

Revelación triple

Esta conversación tuvo lugar en mi mente, a lo largo de las tres horas más largas de mi vida.



(Av) Pero quita esa cara, hombre.
(Ah) —No puedo, Avani. De verdad que no los aguanto.
(L) —¡Shh!
(Av) —¿Ha dicho "persas"?
(Ah) —Si es que tenéis que estar en todos lados, siempre jodiendo.
(L) —¿Pero os queréis callar?
(Ah) —Madre mía, pero si se complican la vida más incluso que nosotros.
(Av) —Pues espérate a que lleguemos a Maimónides.
(Ah) —Huele a banj desde aquí. 
(L) —Me estáis poniendo negra, que lo sepáis.
(Av) —¿De qué estamos hablando?
(Ah) —Yo ya me he ido.
(L/Av/Ah) —¿Quéééééé?
(L) —¿Vosotros sabéis hace cuanto que yo no toco la Biblia?
(Ah) —Creo que me estoy mareando.
(Av) —No quiero tener que volver a fumar para entender esto.
(Ah) —Al paraíso, dice.
(Av) —En Alamût lo hacíamos más rápido.
(L) —¿Ha dicho que la palabra "pardes" es persa?
(Ah) —No lo sé; yoy a no estoy escuchando.
(Av) —Confusión, querido. Todo esto genera confusión [responde a una pregunta del ponente].
(Ah) —Y fornicad como conejos.
(Av) —Hamudi, por Dios.
(Ah) —Qué pasa, ahí dice que formen discípulos.
(L) —Avani, dale algo para que se entretenga.
(Av) —Toma, Hamudi; cállate un poquito [le da un atrapadedos].
(L) —¿De dónde has sacado eso? ¿Funciona?
(Av) —Relaja. O te pone histérico, depende. A ver cuánto aguanta.
(L) —Repíteme otra vez qué hacemos aquí.
(Av) —Abonar el campo de tu futuro. Respira hondo, habibati
(L) —Ay, si no fuera por ti...
(Ah) —¡Me cago en...!
(Av) —Adiós a la tranquilidad. Qué poco aguante tiene.
(L) —Déjamelo, al-Ahmar.
(Ah) —Es que creo que lo he roto...
(Av) —Mira que eres bruto.
(Ah) —Te compraré otro, te lo prometo.
(Av) —No te preocupes, lo importante es que alguno de los tres salga cuerdo de aquí.
(L) —Respiremos hondo, amigos.
(Ah) —¿Esta gente tiene una ley para todo?
(Av) —Por lo visto, sí.
(L) —El de al lado tiene que estar flipando si está leyendo lo que voy escribiendo.
(Ah) —Pues mirar por encima del hombro es de mala educación.
(L) —Ahora que ha dicho "raíz", ¿no le da un aire a Pedro Guerra?
(Av) —No, habibati, no. 
(Ah) —Este si no habla, revienta. ¿O qué? [se refiere a un asistente que interviene]
(L) —Es que hay cosas que no cambian. 
(Av) —No, si el caso es echarle la culpa a alguien. Mira, ya tenéis algo en común. Ellos tampoco aguantan a Alejandro.
(L) —Qué alegría...
(Ah) —¿De dónde ha salido esa señora? [se refiere a otra asistente]
(Av) —Me pregunto cuánto tiempo tardará en caer el qalam (bolígrafo) del segundo piso al suelo.
(Ah) —¿Tú has vuelto a fumar?
(Av) —No, es que estoy aburrido.
(L) —Vosotros sois mi "zuggot" (pareja) favorito.
(Av) —Un día te damos la sorpresa y nos casamos.
(Ah) —Eso sí que lo hacemos mucho, ¿eh? Nos sentamos el uno frente al otro y discutimos.
(Av) —Cierto, cierto.
(L) —¿Los almorávides?
(Av) —Sí, eso quisieras.
(Ah) —Oye, ahora hablando en serio, yo no me estoy enterando de nada.
(Av) —Esta gente no tenía mucha idea de hacer libros, ¿eh?
(L) —Por favor, decidme que queda poco.
(Ah) —¿Qué ha dicho?
(L) —Yo he entendido "Mitra", pero porque me ha dado la gana.
(Av) —¿Última cosa? A ver si es verdad.
(Ah) —Yo ahora he entendido "Miraj".
(Av) —No, si aquí cada loco con su tema...
(L) —Siempre hay lugar para la poesía.
(Ah) —¿Qué cojones...?
(L) —¿Historiografía?
(Av) —Por favor, yo no he venido preparado para esto.
(L) —Y luego se quejan de que nadie explica esto...
(Ah) —Pues por algo será, señores. ¡Por algo será!
(Av) —"Hay ocasiones en que es preferible el martirio a la vida"... Fíjate, eso me ha hecho gracia.
(Ah) —...
(L) —Avani...
(Av) —Tranquila, estoy bien. 
(Ah) —¡Qué pesado es este tío! [se refiere al asistente que ha intervenido antes]
(Av) —Lo estás ignorando de maravilla. Buen trabajo, habibati.
(L) —¿Cuándo nos hemos ido al siglo XVIII?
(Av) —Estos son los problemas de que tu Dios sea una persona.
(Ah) —O sea, que o uno es judío o uno es el resto de cosas. 
(L) —Básicamente.
(Ah) —Yo no entiendo nada.
(Av) —Yo llevo un rato bastante largo sin entender nada.
(L) —Lessing... ¡qué por culo dio ese en la carrera!
(Av) —Ni siquiera en los flashbacks contribuye este hombre a caernos bien.
(Ah) —¿Ha dicho "Lituania"? ¿Pero Viena no está en Austria?
(L) —Vilna, ha dicho Vilna.
(Ah) —Napoleón era un imbécil enano.
(Av) —Y eso es todo lo que tienes que añadir, ¿verdad?
(Ah) —Sí.
(L) —Ya tardaba en salir en puñetero siglo XIX.
(Ah) —Y ahí es cuando salieron judíos de debajo de las piedras.
(L) —Waterloo! I was defeated and you won the war...
(Av) —No, por favor. Bastante tenemos ya. 
(L/Av/Ah) —¿Quéééééé?
(Ah) —Y ahí se jodió la cosa.
(Av) —Y España se encontró con al-Ándalus.
(Ah) —Y la niña hizo tesis.
(L) —¡Y se formó la gozadera...!
(Av) —La hemos perdido.
(Ah) —Joder, si aquí unos y otros, al final todos son invasores.
(Av) —Señor, dame paciencia, bendita tu paciencia.
(Ah) —Como alguno haga una pregunta, lo crujo.
(L) —Yo me meo.
(Ah) —¿Otra vez?
(Av) —Deja de beber té cuando no toca.
(L) —¡La Edad Media lo peta!
(Ah) —No, si el caso es estar ellos por encima.
(Av) —Bendita tu paciencia...
(L) —Es que no me van a gustar nunca, ¿eh? ¡Nunca! Es que me quedo con mi siglo XIX, con sus locos de los turbantes, sus pastiches y sus mierdas... ¡antes que con esto!




Tres horas dan para mucho. Espero que el lector se haya reído. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario