¿Cómo es mayo y aquí no hay nada? ¡Capachao!
Bueno, es posible que ahora gestione mis pensamientos internos de forma diferente. No obstante, siempre está bien pasar por aquí a dejar una lista de impresiones. Vamos a hacer una ronda relámpago de lo que ha pasado hasta ahora. No necesariamente en orden, porque pa qué.
Tengo la mejor comunidad del mundo y estuve en Madrid con ellos. Que volví con una infección de garganta, sí, pero también con un sentimiento de pecho hinchado como palomilla que voy a tardar mucho en sacarme. Ahora mismo, a la altura de la estratosfera ando. Y afónica, pero al carajo.
Hace dos meses tuve la regla... y no quería tenerla. Fue duro. Al mes siguiente volvió a pasar, y fue duro para Bob. Me enterneció mucho y creo que fue algo positivo, aunque en el momento nos pusiese tan tristes a los dos. Pero seguimos intentándolo; con tanto amor, es imposible que no salga algo maravilloso.
Fui a EEUU yo sola, muerta de miedo, y volví contentísima, habiendo enseñado a nuestra gente de allí a decir perfectamente "putos patos". La verdad es que, incluso con el sustillo del último día, fue un viaje fenomenal y que me dejó hasta con ganas de volver. Fíjate, lo que son las cosas. Pero es que, cuando una tiene libertad... dentro de poco voy para Irlanda, también sola, y ahí sí que me voy a acordar de la madre que parió a Peneque, porque al quinto pino ya no me hace tanta gracia ir sin compañía.
He seguido trabajando con Kurta y con Rina y, aunque despacito, pues ahí seguimos.
¡Estoy leyendo muchísimo! Después del parón lector más largo que recuerdo, me he leído una barbaridad de libros, algunos de ellos auténticas maravillas. En cuanto termine con estos párrafos, me voy a hacer la lista que me he prometido hacer (bendito 1SE).
Aunque todavía no me he pasado ni Final Fantasy XII ni Hollow Knight (sí, otra vez, suéltame el brazo), he sido capaz de derrotar a las Señoras Mantis en modo Radiante. Y estoy venidísima arriba, pero tanto que, entre lo de Plumas y esto, creo que voy a convertirme en un satélite de comunicaciones. El siguiente es Grimm, porque estoy loca y ya me apaño yo con lo mío.
Hemos encontrado muchos sitios estupendos para comer, y ya va haciendo tiempo de paseo. Hasta salí a correr, sin ser yo nada de eso. Ah, y tuve la oportunidad de vivir en directo desde casa y con Bob esa locura maravillosa que es el número musical Herald of Darkness de Alan Wake II. Mi vida ya no volverá a ser la misma.
Terminé mi tarea como ND (de momento, solo de momento), y dentro de unos meses sale mi primer juego a la venta. Es muy marciano pensar que en las tiendas habrá un juego del que formo parte. Si lo pienso, me mareo. Así que no lo voy a pensar; voy a prepararme un té, a hacer la lista de los libros y a seguir viendo Criminal Minds, porque el enamoramiento con el Dr Reid no se me va a pasar nunca, por lo que parece.
Es increíble, en retrospectiva, lo bien que estoy ahora y lo terriblemente mal que estuve en 2022. La lección me la llevo más que aprendida; siempre hay luz, hasta en los túneles más oscuros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario