Que alguna vez te encontré, sin precisar ocasión. En otra vida, tal vez. O en otro mundo mejor. La incertidumbre también puede ayudar a este amor, pues nos acerca el misterio de habernos amado tú y yo. Tú y yo.
Cuando ya no pueda más, voy a salir a volar, ¡voy a buscarte!
Aunque estés adentro y este sentimiento se me antoje eterno, esta lejanía duele cada día porque no te tengo. No tengo tu boca, no tengo tus ganas, y por más que intento... ¡ya no entiendo nada! De esta vida loca, loca, loca, con su loca realidad.
Solo quiero cambiar esta angustia que me lleva al fin, y empezar a encontrarle pedazos al mundo. A pesar de mí, a pesar de ti.
Y resulta que mi alma sigue igual. Hallando en tu sonrisa la felicidad.
Tú, ¿por qué? La pregunta que siempre le ha dado sentido a la vida. Yo, ¿por qué? Tal vez porque soy lluvia que calma tu sed repetida. No hubo ilusión ni fantasía. Y me siento más solo que ayer, cuando aún eras nada. Y mis ojos descubren el mismo "por qué" en tu mirada. Y me siento más solo que ayer, cuando aún no existías. Y en mis ojos descubren tus ojos "por qué esta mentira".
Y voy a darle la risa que falta a tu voz. Y voy a darle a tu vida una nueva ilusión. Y voy a darle a tu vida toditas a tu alma las ganas de hallarte en una canción.
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