22 de junio de 2017

"La falta de interés me está destrozando"

Eso cantaba Ella Baila Sola en su tema Algo personal y no puedo encontrarme más de acuerdo. Y es que si hay algo que me haya enseñado este año (y posiblemente el anterior) es que todo en esta vida se mide por interés, del tipo que sea, pero interés al fin y al cabo. Y últimamente estoy rodeada de gente que tiene en general poco interés. Poco interés, poco tiempo que invertir, poca energía que destinar a su relación personal conmigo. Antes este pensamiento me provocaba un considerable cabreo y una ofendida sensación de injusticia, y ahora la cosa ha cambiado. Ahora, como mucho, resoplo fuerte y los mando a la mierda con un gesto, sabiendo que no volveré a acercarme a esas personas y que, como ellos, les devolveré su moneda. Y es que tampoco quiero saber de ellos, para qué me voy a engañar. En mi vida no necesito relojes, lo dije una vez, no necesito relaciones que funcionen mientras soy la única que da cuerda. Sobre todo porque tengo personas maravillosas con las que se siente la reciprocidad como una caricia fresca, y con el calor que hace esto me viene exageradamente bien. 
Ahí os quedáis, gracias por el tiempo que quisisteis darme, pero he tenido bastante de vuestras mentiras y vuestras hipocresías. Ah, y de vuestras auras mistéricas. ¿No es vuestro problema? Pues ya os ocuparéis de él. Atrás han quedado los días en los que el problema era yo. Puede que lo sea, pero hay personas en este condenado mundo que saben que soy "problemática" y no es que me quieran, es que me quieren bien. Me quieren como yo quiero que me quieran. Porque con ellos funciona. Y con el resto, con vosotros, conocidos, no funciona. De modo que para qué vamos a perder el tiempo, para qué vamos a gastarnos los unos a los otros con esta parafernalia. Me voy por donde vine con mi voz, y que os vayan dando. A los de la ciudad en la que estoy, a los de las ciudades en las que he estado, a los de las ciudades en las que no he estado, en las que estaré. A todos, en general. A la gente que estuvo en mi vida, que ya nunca más estará en ella. A partir de... ya. 

Yo de momento no soy madre de nadie, y hermanos pequeños tengo el mío y no quiero más. Así que apañaos con vuestras historias, que yo pasaré estos días que quedan con la gente con la que realmente quiero estar. En esta ciudad y en todas en las que viva.

Qué claro me deja la vida el regalo tan grande que me ha hecho estar en esta ciudad. Y lo que te rondaré, morena. Bueno, o rubia. 



¿Qué has venido a buscar de tan lejos aquí? Solo puedo ofrecerte una canción para intentar aliviar tu mal humor cuando ya no puedas más. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario